Capa pluvial en perfecto estado de conservación, con dos disimulados y antiguos arreglos en la parte que soporta las dos bandas de los cierres.
Trabajo de las primeras décadas del siglo XX, realizado en sedas adornadas con damascos.
Porta capillo y cierres originales; estos últimos de cierta importancia y belleza (tal vez en plata).
Medidas de 135 cm de altura y de 260 cm de anchura.