Álbum debut homónimo de la cantante canadiense Amanda Marshall, lanzado en 1996. Este álbum presenta una mezcla de rock, pop y baladas, destacando la potente voz de Marshall y sus letras introspectivas. Incluye éxitos como Let It Rain, Birmingham y Dark Horse. El álbum fue un éxito comercial y de crítica, estableciendo a Amanda Marshall como una de las artistas más destacadas de la música pop rock de los años 90.