DE LA DIEALECTICA AL DIALEG EL CONCEPTE DE RELIGIO DE KARL BARTH
PERE CARRERAS I CABALLE
El paso de la dialéctica a la dialéctica (diálogo) en la concepción de la religión de Karl Barth implica que la teología no es un intento humano de comprender a Dios, sino un diálogo divino-humano que se funda en la Palabra de Dios (Cristo) y en su carácter de lo «Absolutamente Otro». La dialéctica barthiana, en contraste con la hegeliana, encuentra la verdad no en la superación de contradicciones humanas, sino en la negación de la teología natural y la afirmación de la fe en la revelación divina.
De la Dialéctica (Hegeliana) a la Teología Dialéctica (Barthiana)
Dialéctica hegeliana:
Se caracteriza por el movimiento de la tesis, la antítesis y la síntesis, donde el espíritu se autoexponiendo en un proceso de confrontación y superación de contradicciones para alcanzar una verdad superior.
La Teología Dialéctica de Barth:
Barth usa la palabra «dialéctica» no para describir un proceso filosófico, sino la naturaleza misma de la Palabra de Dios y el encuentro con el hombre.
El Concepto de Religión en Barth
1. Dios como lo «Absolutamente Otro»:
Dios es incomprensible, desconocido e inaccesible para la capacidad cognitiva humana.
2. La fe como el único camino:
La fe es la respuesta a este vacío, el acto de someterse a un juicio que nos muestra nuestra incapacidad de comprender a Dios y su naturaleza inaccesible.
3. La Palabra de Dios (Cristo):
La teología, entendida como «hablar de Dios», es posible a través de la Palabra de Dios, que es Cristo mismo. La Escritura es solo un testimonio de esta Palabra.
4. La negación de la teología natural:
Barth rechaza la idea de que la teología pueda surgir de la razón humana o de un análisis filosófico de la existencia. La teología no es una respuesta a una pregunta humana, sino la respuesta originaria de Dios a la humanidad.
5. La contradicción divina:
La Palabra de Dios se revela en la contradicción, tomando la forma de paradojas como «el Dios-hombre» o «la sabiduría loca», porque encuentra al hombre en su estado de contradicción.
6. El diálogo divino-humano:
La teología es un diálogo de pregunta y respuesta. Es Dios quien toma la iniciativa al revelar su Palabra, y el hombre responde desde la fe.
El Tránsito Dialéctico y el Diálogo
La noción de dialéctica para Barth se refiere al «límite» que separa a Dios del hombre.
La teología se convierte en un «diálogo» en la medida en que se somete a esta revelación de Dios. No se trata de una especulación filosófica, sino de una respuesta a la Palabra que es Jesús.
La teología no busca crear verdades dogmáticas desde el lado humano, sino reconocer la verdad que Dios revela, una verdad que se encuentra «más allá de todo sí y de todo no» humanos.