Este libro es un retrato de la organización fascista de la sociedad en una pequeña capital de provincia durante los primeros años de la dictadura franquista. Aunque el modelo que sirve de base a esta narración histórica es la ciudad de Girona, el uniformismo impuesto por el Régimen permitiría ponerle otro nombre sin que cambiara casi nada. Un joven de esta ciudad, que ha hecho la guerra en el ejército republicano, intenta, en Madrid, en unas duras oposiciones a cátedra, después de un primer fracaso el año anterior, rehacer aquello que la guerra y sus consecuencias le habían quitado: un lugar estable de profesor en el Instituto de su ciudad natal.