La reputación de Dimitri Kyriakis no dejaba dudas sobre su implacabilidad. Sin embargo, su principal objetivo era vengarse de Andreas Papadiamantis. Para ello, decide seducir a Bonnie, la enfermera de Andreas, creyendo que ella busca una parte de la fortuna familiar. Solo después de intimar con ella, Dimitri se da cuenta de que Bonnie siempre había dicho la verdad.