En este encantador relato, Dylan Thomas evoca sus recuerdos de infancia de las Navidades en un pequeño pueblo galés. A través de su prosa lírica, el autor nos transporta a un mundo de nieve, regalos y celebraciones familiares, capturando la magia y la nostalgia de la Navidad desde la perspectiva de un niño. Esta edición cuenta con las ilustraciones de Edward Ardizzone, que complementan a la perfección la atmósfera cálida y entrañable del relato.