En 'Una árida estación blanca', André Brink nos presenta a Ben du Toit, un profesor blanco en Johannesburgo durante el apartheid. Inicialmente apolítico, su visión del mundo se transforma tras la detención y muerte de un conserje negro de su escuela. Decidido a descubrir la verdad, Ben se adentra en una peligrosa investigación que revelará una red de mentiras y corrupción, poniendo en riesgo su vida y la de su familia. Esta novela es un retrato impactante de la injusticia racial y la lucha por la verdad en un contexto de opresión.