En un aislado convento, una joven monja da a luz a un niño que poco después aparece estrangulado. El tribunal encargado del caso designa a una psiquiatra para que determine la culpabilidad de la religiosa. Sin embargo, la doctora llega al convencimiento de que puede ser inocente y, en sus investigaciones, se encuentra con la Madre Superiora, una mujer experimentada con un matrimonio en su pasado. Esta novela de Leonore Fleischer explora temas de fe, maternidad y misterio en un contexto religioso.