Este libro bilingüe narra la infancia del poeta mexicano-americano Juan Felipe Herrera, quien creció como hijo de trabajadores agrícolas migrantes en los campos de California. Sus padres le inculcaron el amor por la vida al aire libre y le transmitieron el valioso regalo de la poesía. A través de sus recuerdos, Herrera celebra sus raíces y la riqueza de su herencia cultural, ofreciendo una mirada conmovedora a su niñez y a las experiencias que lo moldearon como escritor y persona.