Este libro, titulado 'Curas obreros: Curenta y cinco años de testimonio 1963-2008', recoge los testimonios de curas que vivieron la vida de Jesús al servicio del Reino de Dios. La obra destaca la importancia de la presencia de una Iglesia militante en la oposición al franquismo, que brindó seguridad a muchos españoles y evitó que la Transición degenerara en un enfrentamiento militar. Estos curas obreros, jóvenes seminaristas integrados en movimientos sindicales y secularizados en movimientos sociales como la Hermandad Obrera de Acción Católica (HOAC), la Juventud Obrera Cristiana (JOC) o la Acción Católica Obrera (ACO), fueron un antídoto contra el anticlericalismo de la clase obrera. Su labor, junto con el movimiento renovador del Vaticano II, aportó mayor credibilidad a la Iglesia y contribuyó al futuro del cristianismo en España.