En esta novela de José Sarney, el autor evoca con talento la atmósfera del noreste de Brasil, donde los pescadores de Maranhao rodean al héroe Cristórico, capitán del mar océano. La novela transcurre en una atmósfera de fantasmagoría lírica que le da fuerza narrativa y poética, mezclando leyenda y realidad en una historia fascinante.