En una atmósfera de misterio y disparate, la familia Briones, llena de excéntricos, desentierra un pasado repleto de secretos y sombras. Fernando, el novio de una de las hijas, quien también oculta algo tras su extraño comportamiento, se encargará de resolver todos los enigmas. El mayordomo es el único personaje cuerdo en esta obra de personajes al borde de lo inverosímil. Estrenada en 1940, esta obra es precursora del teatro del absurdo gracias a sus diálogos ingeniosos y su humor intelectual.