En 'En manos del destino', Darcy Howard contrata a Fleur para motivar a sus empleados, pero pronto se da cuenta de que necesita que ella le enseñe a disfrutar de la vida. A medida que Fleur intenta ayudar a Darcy, descubre que es él quien le está mostrando lo mejor de la vida. La atracción entre ellos crece, y Fleur comienza a desear que su contrato temporal se convierta en algo permanente, tanto en lo personal como en lo profesional.