Este libro relata la historia del comercio humano en el Atlántico, explorando la trata de esclavos desde la destrucción de los reinos africanos hasta la brutalidad de las plantaciones americanas y la criminal actuación de los belgas en el Congo. A través de sus páginas, se revela cómo blancos, negros, católicos, protestantes y musulmanes estuvieron unidos en la tarea de someter al débil para obtener beneficios, saqueando sistemáticamente el continente africano y fragmentando a los grupos étnicos. Un relato sobre la crueldad y la muerte que presidieron el tráfico negrero y sus efectos devastadores en la historia universal.