Grignotin y Mentalo pasean a la luz de la luna. Grignotin está preocupado: ¿Mentalo le quiere? ¿Cómo le quiere? ¿Un poco? ¿Mucho más? Mentalo no escucha, lo que le interesa es la hermosa luna. Le propone a Grignotin sentarse un rato para admirarla. Pero Grignotin no lo entiende así. La luna está tratando de robarle a su amigo. Entonces se enfada y nada sale bien... Un libro para niños a los que ya les gusta leer solos.