En este encantador libro infantil, Charlie utiliza su imaginación para convencer a Lola, una niña muy especial con gustos muy particulares a la hora de comer, de probar alimentos nuevos y emocionantes. A través de divertidas comparaciones y juegos, Charlie transforma la percepción de Lola sobre la comida, convirtiendo la hora de la cena en una aventura llena de descubrimientos y sabores inesperados. Una historia que celebra la creatividad, la paciencia y el amor fraternal, ideal para fomentar hábitos alimenticios saludables en los más pequeños.