En este encantador libro infantil, Simon, un pequeño conejo, se enfrenta a la idea de ir a la escuela por primera vez. Con una mezcla de humor y ternura, Stephanie Blake aborda los temores y ansiedades que muchos niños experimentan ante este nuevo capítulo en sus vidas. A través de las divertidas ilustraciones y la entrañable historia, los pequeños lectores descubrirán que la escuela puede ser un lugar lleno de sorpresas y momentos maravillosos. Un libro perfecto para preparar a los niños para su primer día de clases.