Este libro explora la filosofía de Kierkegaard, destacando su enfoque en el individuo y su relación con Dios. Se analiza su pensamiento existencialista y su crítica al sistema establecido, así como su visión sobre la angustia, la desesperación y la verdad subjetiva. Una obra esencial para comprender la filosofía de uno de los pensadores más influyentes del siglo XIX.