Este libro de Emmanuel Pierrat explora la historia judicial de la depuración en Francia entre 1943 y 1953. Se examina cómo Francia lidió con la sanción de colaboradores con la Alemania nazi tras la Segunda Guerra Mundial, dividiendo al país entre el perdón y la justicia punitiva. A través de figuras clave como Pétain, Laval y Renault, se revive una década de desilusiones y reconstrucciones que aún hoy generan controversia.