En una sabana inexplorada de Kenia, el paleoantropólogo Ken Lauder descubre a un muchacho cuyas características físicas coinciden con el llamado eslabón perdido. Algo se oculta en las profundidades de la selva, que sobrevive con el peso de millones de años. Huellas de pies solo imaginables en un pasado remoto hollan la tierra, huellas recientes. Jeremiah es un hombre honesto, trabajador, ambicioso y abnegado. Amelia es una joven hermosa, impulsiva, consentida y egoísta. Él quiere tener hijos, pero ella no quiere perder su juventud cuidando de un bebé. La vida, sin embargo, les enseñará a los dos que el corazón no siempre tiene la última palabra.