En un bosque de Kent, el cuerpo desnudo de una joven es descubierto, víctima de violación y asesinato. El crimen parece obra de un maníaco sexual, desencadenando una investigación policial exhaustiva y rutinaria. Sin pistas claras, el sargento detective Rusck se encarga del caso, interrogando a todos los sospechosos con antecedentes sexuales en el distrito. Entre ellos, encuentra a Kreymane, un antiguo compañero de estudios convertido en un rico granjero, felizmente casado. Esta es una historia de ingenio y sutileza, donde cada interrogatorio revela nuevas pistas y secretos ocultos.