Ally Grayson nunca quiso ser una heroína. Su sueño era escribir grandes historias, no vivir un cuento de hadas. Sin embargo, cuando fue raptada por un malhechor encantador, que parecía sacado de una novela, Ally se sintió completamente fascinada. No importaba que estuviera comprometida con otro hombre con el que, de todos modos, no tenía la menor intención de unirse en un matrimonio por conveniencia. No obstante, cuando descubrió que Mark, su incomodado novio, era el hombre de sus sueños, Ally tuvo que tomar una decisión: involucrarse en un mundo de engaño y asesinato sin nadie que la protegiera o confiar en un hombre que mentía, pero que hacía vibrar su corazón.