Este libro detalla la evolución del infante romano tardío entre los siglos III y VI d.C. Explora cómo las legiones tradicionales de infantería pesada fueron gradualmente reemplazadas por fuerzas más diversas, dominadas por caballería y apoyadas por tropas de proyectiles. A pesar de la creciente importancia de la caballería, la infantería siguió siendo la columna vertebral del ejército romano hasta el siglo V. Se describe a un guerrero diferente al legionario anterior, quizás menos disciplinado pero más flexible, listo para desplegarse en puntos conflictivos y luchar tanto como escaramuzador como infante pesado.