En 'Leaves from the Fig Tree', Diana Duff narra su infancia en Annesgrove, una casa señorial irlandesa, donde creció rodeada de fantasmas familiares y tesoros escondidos. A los 18 años, se sumerge en el glamuroso mundo de Kenia en la década de 1950, llegando a ser doble de Grace Kelly antes de dedicarse a la enfermería. Tras casarse con un joven oficial del Servicio Colonial, vivió noches de soledad y temor durante la rebelión del Mau Mau. Más tarde, en Tanganica, fundó la primera guardería inter-racial de África Oriental, antes de trasladarse a Sudáfrica en los años 60, en pleno apartheid.