Este libro de Marcel Pacaut explora la historia de las órdenes monásticas y religiosas en la Edad Media, un período esencial en la historia eclesiástica y espiritual. Examina cómo monjes y religiosos influyeron en la Iglesia y cómo la vocación religiosa se entendió como una huida del mundo o una preparación para la acción. Además, analiza el papel de los monjes en diversos campos como el pensamiento, el arte, las instituciones, la economía y las técnicas, destacando la importancia de organizaciones como Cluny, Cîteaux y los Mendiants en la evolución de la Edad Media.