Lizzy Harrison lleva una vida perfectamente organizada, con su trabajo en relaciones públicas y una agenda repleta de actividades. Sin embargo, cuando su mejor amiga, Lulu, cuestiona su necesidad de control, Lizzy comienza a preguntarse si necesita relajarse un poco. La vida de Lizzy da un giro inesperado cuando se ve envuelta con Randy Jones, el cliente estrella de su jefe. A medida que se deja llevar, Lizzy descubre que perder el control podría traerle más de lo que jamás imaginó.