En esta autobiografía, Florence Brokowski-Shekete narra con humor sus experiencias como mujer negra en una sociedad blanca. Nacida en Hamburgo de padres nigerianos, Florence es acogida por una mujer en Buxtehude. A los ocho años, sus padres la llevan a Lagos, un país desconocido para ella. Gracias a una profesora, regresa a Alemania y construye su camino. La autora describe los desafíos de construir puentes y establecer límites, la integración y la búsqueda de identidad, y el equilibrio entre la carrera y la maternidad como madre soltera. Una historia de vida inspiradora.