En el año 2010, Yamato, quien de niño se encontró con un detective moribundo llamado Shôji, descubre un billete de 500 yenes entre las pertenencias de su padre. Sus padres adoptivos desaparecen y es acusado injustamente de un crimen. Para esclarecer la verdad, Yamato y Miku se dirigen a Fuchû, donde investigan el caso de los 300 millones de yenes y al detective Shôji. Este tomo continúa la serie de misterio e intriga basada en hechos reales, ideal para lectores jóvenes y adultos.