Piotr es un joven de catorce años que vive en una granja al sur de Moscú junto a su padre, Sergei Andreievich. En la Rusia de los zares, la vida no es fácil para los pequeños agricultores, quienes deben trabajar arduamente para subsistir. A pesar de las dificultades, Piotr y su padre viven felices hasta que un día Sergei es deportado a Siberia. Piotr emprende entonces un largo y arduo viaje a través de Rusia y Siberia para reunirse con su padre.