En un tranquilo día de verano, una joven desaparece mientras va en bicicleta a practicar voleibol. Su bicicleta abandonada se encuentra en el mismo lugar donde otra joven fue agredida y asesinada treinta y tres años antes. El autor original nunca fue llevado ante la justicia, por lo que las autoridades sospechan que el mismo asesino ha vuelto a atacar. El detective Kimmo Joentaa pide ayuda a su antiguo colega Ketola, que trabajó en el asesinato original, con la esperanza de que puedan resolver ambos casos. Mientras siguen las pistas, Kimmo descubre que la verdad no siempre es lo que uno espera.