En Mullaby, Carolina del Norte, Emily Benedict busca respuestas sobre la vida de su madre. Al llegar a la casa donde creció su madre, conoce a su abuelo y descubre que los misterios son una forma de vida en Mullaby. Las habitaciones tienen un papel tapiz que cambia según el estado de ánimo, luces inexplicables cruzan el jardín por la noche y una vecina hornea pasteles con la esperanza de reavivar un amor perdido. ¿Puede un pastel de colibrí traer de vuelta un amor perdido? ¿Hay un fantasma bailando en el jardín de Emily? En este pueblo de inadaptados adorables, lo inesperado encaja a la perfección.