Tinta-bihotz es una novela juvenil escrita por Cornelia Funke, traducida al euskera por Naroa Zubillaga Gomez. La historia sigue a Meggie y su padre Mo, un restaurador de libros antiguos, en una aventura llena de misterio y magia. Cuando un extraño aparece en su casa, Meggie y Mo se embarcan en un viaje para proteger un libro especial y descubrir los secretos que rodean la desaparición de la madre de Meggie. Esta novela es un homenaje al mundo de los libros y la literatura universal, siendo la primera parte de una trilogía que ha sido adaptada al cine.