Veronika tiene todo lo que podría desear, pero no es feliz. Una mañana decide morir y toma una sobredosis, solo para despertar en el hospital donde se da cuenta de que solo le quedan días de vida. La historia sigue a Verónika a través de estos intensos días, explorando temas de salud mental, la búsqueda de la felicidad y el valor de la vida. La novela está ambientada en un hospital psiquiátrico y ofrece una profunda reflexión sobre la normalidad y la diversidad, transformando el drama de la infelicidad en la plenitud de la aceptación de la vida y su belleza.