En la Cartagena del siglo XVIII, una niña de doce años, Sierva María, es mordida por un perro rabioso. A medida que su condición empeora, se cree que está poseída por demonios. El padre Cayetano Delaura, un sacerdote, es enviado para exorcizarla, pero en cambio, se enamora de ella. Esta novela explora temas de amor, fe, poder y la naturaleza de la posesión. Ambientada en un mundo exótico y colonial, la historia nos sumerge en un romance prohibido y las consecuencias de desafiar las convenciones sociales y religiosas.