En este libro, Philip Gourevitch narra los eventos ocurridos en Ruanda y sus países vecinos a partir de 1994, cuando el gobierno ruandés instó a la mayoría hutu a asesinar a la minoría tutsi. A través de relatos de primera mano, el autor explora las consecuencias del genocidio, los desplazamientos masivos y la búsqueda de justicia. Un análisis profundo sobre la capacidad de una sociedad dividida para reconstruirse y la resistencia del espíritu humano en situaciones extremas. Este libro es un testimonio impactante de la respuesta de un pueblo al genocidio y una reflexión sobre la condición humana. Gourevitch examina los desafíos psicológicos y políticos de la supervivencia, así como el conflicto en el Congo, donde las fuerzas genocidas resurgieron. ¿Puede un país compuesto por perpetradores y víctimas crear una sociedad nacional cohesiva? Esta obra conmovedora ofrece una perspectiva valiosa sobre la lucha por construir órdenes políticos habitables en un mundo marcado por la brutalidad.