21 de nov, 2019 por Ignacio del Valle
Recordamos a Corín Tellado, nuestra más prolífica y admirable escritora en cuestiones de amor. Una coleccionista de pasiones con más de 400 millones de novelas vendidas.
La práctica hace a la maestra. En asuntos cordiales Corín Tellado con más de 4.000 novelas, a folletín semanal, telenovela o teleserie, fue nombrada por la UNESCO en 1962 como la autora más leída en español, con más de 400 millones de novelas vendidas. Como de la cantidad sale la calidad, al comentarle este dato Mario Vargas Llosa en una entrevista no es de extrañar que le dijese a la cara “y más leída que tú”. En número de lectores y en buen gusto literario Socorrín (de dónde viene Corín) fue exquisita y de rompe y rasga, entre sus lecturas preferidas nunca faltaron Alejandro Dumas, Balzac o Miguel Delibes.
La editorial Bruguera está pasando a la historia por sus métodos estajanovistas aplicados tanto a humoristas gráficos de la talla de Francisco Ibáñez, reyes de la novela del oeste como Marcial Lafuente Estefanía y nuestra protagonista, la muy asturiana Corín Tellado. Las cosas de vivir de la escritura siempre fueron complicadas como sintetizó Larra con aquel “En España escribir es llorar”. Corín Tellado convierte el aforismo en un “En España escribir es amar”, o leer dramones de amor, cubertería de plata y cristalería de bohemia con final predecible y no siempre feliz.
Para ponernos en contexto, os recordamos que en aquellas décadas el divorcio no era opción, las separaciones, arrejuntarse y las cosas de la convivencia que hoy vemos naturales en todas las opciones sexuales eran anatema religioso. Aunque nuestra sociedad siempre fue fecunda en líos extramatrimoniales y demás cosas del querer. Tiempos grises en que las mujeres no podían disponer de sus dineros. Corín Tellado mostró las maneras de empoderarse a todo tren con una libertad de criterio que asombra.
Corín Tellado prototipó abundantes protagonistas femeninas fuertes y hermosas. Hombres, homes, homucos, monicacos y cagurrios de todas las calañas. Y en la diversidad de mundos contrastados surge la atracción de los contrarios, el arrebato de amor para llorar a moco tendido.
Ataques de cuernos, los afectos no correspondidos y nada de lo prometido después de haber... pues eso, que en lo carnal y los picores urgentes por esos apetitos sexuales satisfechos, de las maneras más sórdidas y con mala conciencia, en ese mar de hormonas, Corín Tellado con su particular forma de evadir la censura huelebraguetas dotó de sentido al amor carnal en pulpa de papel, pero también en numerosas adaptaciones a series de televisión y el ágrafo formato de la telenovela.
Corín se confiesa: "Yo hilvano un argumento en 5 minutos. Las historias de la vida cotidiana me inspiran. Yo recopilo las vivencias de la calle y las acoplo a mis cosas. Mis personajes tienen una tremenda humanidad. Hay muchas chicas que en la vida real han vivido lo que viven mis personajes. Yo adorno con fantasía las realidades, siempre escribo de gente de la alta sociedad, rodeada de lujos".
Como donde hay billete no escasea el vicio, con el seudónimo de Ada Miller, nuestra entrañable Socorrín se inició en la narración lúbrica y de sonrisa vertical con 20 novelas de febril feromona.
Aventuras, celos, miedos, amistad, desgarro y decepción. Encuentros, abandonos, odios irreconciliables en parajes exóticos y mujeres que fumaban a costa de ser tildadas de perdularias y conducían sus coches de alta gama a semejanza de Corín Tellado. La escritora es toda una coleccionista de pasiones, que arrasa con más 5.000 lotes a la venta en todocoleccion, donde viven los recuerdos de aquellas pasiones juveniles a todo dolor.