8 de mar, 2018 por Wenceslao Fernández
Este relicario barroco contiene 365 reliquias de los Santos católicos, que corresponden a cada día del año en función del nombre del Santo
Entendemos por relicario a la composición que sirve para guardar reliquias o recuerdos de los santos y exponerlos para ser venerados. A partir del siglo IX empezaron a colocarse en el altar en forma de cajas o arquetas. Posteriormente fueron evolucionando y en la actualidad nos encontramos con relicarios del siglo XIII en bustos, estatuas y custodias.
Llevan por nombre reliquias, porque en ellas albergan restos de personas que han sido santificadas
Hay todo un fervor con las reliquias, ya que son restos pertenecientes a santos, venerados por el Cristianismo. Los orígenes de estas reliquias las encontramos en los clavos que se usaban para la crucifixión, las sábanas que cubrían los cuerpos, etc. Todo ello se transformó poco a poco en reliquias.
Como había que custodiar estos restos sagrados, se crearon los relicarios, que tenían como base unas cajas o cofres que hacían de salvaguarda. Conforme pasaron los siglos y se asentó el cristianismo, estos restos se comenzaron a exhibir en forma de culto hasta que se crearon los relicarios de gran valor, pues eran expuestos en la liturgia.
La veneración de dichas reliquias se hacía acudiendo a los altares y los santos sepulcros que las albergaban, hasta que fueron guardados en lo que hoy día conocemos como relicarios.
Este lote destaca por la particularidad de estar compuesto por 365 reliquias, correspondientes a cada día de año por cada Santo católico. En su base se admira una tapa trasera sujeta de hilos y cruzado con un sello de lacre. Procede de una familia noble que ha ido pasando por las manos de Anticuarios y Galeristas de Arte.
Son sin duda los Relicarios una de las piezas más extraordinarias dentro de las Antigüedades Religiosas. En todocoleccion encontrarás más de 2.800 lotes de gran interés y que recogen un pedacito de historia de la religión católica.