21 de may, 2019 por Ignacio del Valle
Sir Arthur Conan Doyle fue algo más que el creador del detective Sherlock Holmes. Médico sin pacientes y escritor bendecido por el éxito. En todocoleccion puedes deducir las pistas de una vida muy espiritual.
El escocés Sir Arthur Conan Doyle figura en los tratados enciclopédicos de la literatura inglesa desde la mitad del siglo XX. Eliminó Ignatius de su nombre original pasando a la posteridad como Arthur. Repasamos la personalidad de este médico fracasado como oftalmólogo y bendecido como escritor (uno de los mejores pagados de su tiempo).
La figura de Conan Doyle se ha agrandado con la repercusión de su obra en los nuevos formatos del cine y la televisión. Fue nombrado caballero en 1902 por su aporte propagandístico a la justificación de la guerra de los Bóers. Católico, deportista, hábil ya sea jugando al criquet o sobre el tapete de billar. Entusiasta aventurero, hombre de gran corazón y con un pico de oro para narrar historias increíbles, Conan Doyle es uno de los padres indiscutibles de la novela negra.
La producción literaria de Conan Doyle sintetiza el ambiente victoriano entre la mojigatería y el cientificismo. Retratista de la City del imperio, la ciudad de lluvia y niebla, la frontera entre los bajos fondos y los barrios aristocráticos. Entre horarios de tren, campiñas y sombreros de copa y bombines, muestra grandezas y entresijos. Crímenes y ajustes de cuentas en un imperio en ebullición alimentado por los avances tecnológicos, las revoluciones obreras, los conflictos bélicos y un supervillano de manual: El Dr. Moriarty.
El prototipo de detective observador y escéptico con aires de superioridad rayanos en la mala educación es el de Sherlock Holmes. Su marca personal es una gorra de tweed con orejeras plegadas y una pipa a pedir de boca. Estudio en Escarlata, El signo de los cuatro, El perro de los Baskerville, Las aventuras de Sherlock Holmes, Memorias de Sherlock Holmes o El archivo de Sherlock Holmes son algunas de sus aventuras más conocidas. Sherlock y sus desconciertos de violín y la afición a las jeringuillas, la mente preclara interpretada en la gran pantalla por actores de la talla de Peter Cushing, Vasily Livanov, Christopher Plummer y por estrellas del milenio como Robert Downey Jr. o Benedict Cumberbatch.
221B Baker Street es la dirección en Londres del detective más versionado en todos los soportes. Novelas, cómics, representaciones teatrales, radionovelas, películas de cine, series de televisión y videojuegos. El carácter bipolar de Sherlock Holmes, el garbanzo negro de la familia, y la amistad con su biógrafo el Dr. Watson. Un fenómeno de ficción que se ha materializado con la residencia en el West End, en Baker Street, una atracción turística de notable interés que recrea las estancias del detective y su compinche, mimados ambos de cerca por la Señora Hudson: una fiel ama de llaves muy paciente y sensata.
Conan Doyle toma contacto con el movimiento espiritista en 1890, la obsesión por el más allá, una disciplina paranormal que se dota de un aire racional. En los días de la fotografía post mortem, los duelos y la necesidad de comunicarse con seres del ultramundo para aliviar la pérdida. La muerte de la primera esposa de Conan Doyle le inclinó a buscar respuestas en las fronteras de lo Iker Jiménez.
Exploró dimensiones alternativas mano a mano de personajes tan famosos como el escapista Houdini. La pérdida de once familiares directos incluyendo a su primera esposa por tuberculosis y más personas cercanas en las batallas de la Gran Guerra, la Primera Guerra mundial, arraigó en el autor la creencia de “No hay muerte”. En todocoleccion, la memoria de Sir Artur Conan Doyle está siempre presente a través de miles de lotes. ¿Te animas a buscarlos?